RECORDANDO A ACELA
De todos es conocido —aunque ya no tanto por los más jóvenes— que la villaclareña Acela De Armas Pérez dominó el ajedrez femenino cubano durante las décadas del 70 y 80; a mí modo de ver las cosas, recibió el batón de manos de su comprovinciana Nora Laya, y luego lo entregó a Vivian Ramón, Zirka Frómeta y más acá en el tiempo a Maritza Arribas. Ganó Acela 9 campeonatos nacionales (solo superada por Maritza con 11), en los años 1971-73-74-75-76-77-79-86-88. Asistió la batalladora atleta de Santa Clara a las primeras cuatro primeras Olimpiadas Mundiales a las que asistió Cuba en el sexo femenino, Salónica'84, Dubai'86, Salónica'88 y Novi Sad'90, en 1988 como 1er tablero y las otras tres como 2do, detrás de Vivian
Pero ahora lo que quiero compartir con ustedes es una marca de Acela poco publicada, respecto a los Capablancas Femeninos que comenzaron a celebrarse a finales de los 80, y es que, en tres de estos certámenes consecutivos, 1988-89-90, fue la escolta de las jugadoras soviéticas, que prácticamente venían a "robar" a estas lides.
En 1988 detrás de Nino Gurieli y Ketevan Arakhamia, en 1989 siguiendo a Irina Chelushkina y Zoja Lelchuk, y en 1990 escoltando a Elena Sedina y Elena V. Bistriakova. Lo curioso es que la jugadoras de la antigua URSS vinieron las tres veces en parejas, y en cada ocasión hicieron el 1-2. De este último certamen les mostramos el cuadro sinóptico.
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