¡Con el corazón! se llevó esta décima partida el campeón mundial Magnus Carlsen igualando de esta forma el match, a falta de dos cotejos más que podremos ver (los canarios) en la tarde noche del sábado y del lunes (pues por fin veo algo bien hecho a la FIDE: “Entre partida y partida, ambas decisivas, va a haber un día de descanso - !?).
Los “carlsianos” no debemos cantar la victoria final antes de que ocurra, pero este resultado, evidentemente nos ha aliviado.
En este mundo moderno en donde la carrera predomina al sosegado caminar, este cronista ha detectado cómo enseguida muchos seguidores (con la ayuda de los módulos, ¡claro está!) han puesto el grito en el cielo por las dos posibilidades perdidas de Karjakin para haber hecho tablas en sus jugadas 20 y 21 y con ello haber dado un paso de gigante en su pretensión al máximo título.
Pero suele suceder que no siempre llega a la meta el que corre más rápido (!?).
En el primer caso que nos ocupa de las posibles tablas rápidas de Karjakin, que parecía el más evidente por el “supuesto” jaque continuo inmediato, Carlsen todavía tenía otra interesante opción (¡¡atención!!) que le hubiese permitido por lo menos alargar mucho las partida.
Y en la segunda oportunidad gozada por el GM ruso para llenar de gloria su expediente, no resulta nada fácil ver sobre el tablero las jugadas negras obligadas posteriores a la entrega, 22…Df7! y 23…Df6!.
Todo esto lo explico convenientemente en los comentarios que siguen a este interesante cotejo.
Para este cronista sucedió algo que le puede pasar a cualquier ser humano (Carlsen incluido, por muy “genio” que sea): Ninguno de los dos consideraron efectiva la oportunidad de entregar el caballo en “f2”.
De hecho cuando la pieza negra no se estrella en tal vital casilla del enroque, Magnus Carlsen comienza a disfrutar de una verdadera ventaja posicional (muy de su gusto) que estaba planeando obtener desde un principio (!?).
En el largo plazo, bien es sabido que el GM noruego se mueve ¡cómo pez en el agua!...
En la posición del diagrama llegó el momento deseado por los carlsianos, desde que comenzó este Mundial: 57.b5! fue ahí todo un mazazo que “tumbó” a Karjakin, aunque ojo, no definitivamente, pues el GM ruso (de origen ucraniano) se logró levantar y todavía quedan por disputar (al menos) dos asaltos más, que seguro que serán apasionantes.
Decía al principio de la crónica que mi admirado Carlsen, ganó la partida por su “fuerte corazón”. Ese empuje con tal energía sólo es patrimonio de los grandes del tablero; que deben combinarlo también con mantener su cabeza fría y su mano hirviendo.
Pasemos pues al desarrollo de este décimo cotejo que me ha llevado ¡once horas! ordenarlo en la jungla de posibles variantes todas desarrolladas en estilo Informator.
Así sea!!:
http://www.viewchess.com/cbreader/2016/11/25/Game969488602.html
Amigos lectores, el ajedrez es más una carrera de fondo que rápida y espero por ello, que en este Campeonato Mundial no sean necesarias las partidas de desempate.
No cabe duda que ahora “Caissa” (la musa inspiradora) ha vuelto a parar a los brazos de ¡Magnus Carlsen!:
https://www.youtube.com/watch?v=84g1hurZG4U
Ángel Jiménez A.
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